***Ser como Jesús***

***Ser como Jesús***
Los seres humanos,
todo lo complicamos,
el amor, el perdón, la fe,
la vida...
Todo lo enredamos.

Y al final, que nos hace
buscar a Dios, ponernos
en su presencia...
Es porque en el encontramos
la pureza de la escénica,
de lo que en el fondo del
corazón anhelamos.

Cuándo leemos su palabra,
nos es tan fácil identificarnos,
con el que sufre, con el enfermo,
con el necesitado.

Pero casi nunca nos hemos
en realidad identificado,
con el que prodiga esa compasión,
ese amor, esa misericordia,
con Jesús.

Decimos que caminamos con Él,
en la cuaresma, lo acompañamos
en su pasión, en su sufrimiento,
pero muy pocos llegamos al
encuentro con el Resucitado.

Se nos acaba el fervor,
ya estamos cansados,
no es suficiente nuestro amor...
Porque el Resucitado alegra, si,
da gozo, si, pero también interpela
nuestra fe.

Reta ese amor que decimos
profesarle, incómoda la
Conciencia...
Porque cuando estamos
frente a Él, su luz deja
al descubierto,
lo que antes no se podía ver.

El problema no es lo
que mostramos,
el problema es lo que
ocultamos...

A pesar muy nuestro,
el sigue esperándonos,
allí en la tumba de nuestros
fracasos, en el lugar donde
hemos sepultado todo aquello
en lo que hemos fallado.

El nos espera allí,
para mostrarnos la tumba vacía,
para con nosotros iniciar,
un nuevo amanecer y que cada
día nos podamos parecer a Él,
cuya misericordia y amor,
son infinitos.
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