El resucitó

El señor resucitó y su amor se manifestó
porque envalde sería nuestra fe,
si El no hubiera resucitado.

Primeramente se apareció a quienes
más lo necesitaban, a María Magdalena
que moría de pena...
A los discípulos de Emaus quienes regresaban
con sus esperanzas hechas pedazos...
A Pedro quien lo había negado y a sus discípulos
que lo habían abandonado y traicionado...
A Tomas el discípulo empecinado
que sin ver jamás lo habría patentado.

Y hoy se sigue manifestando a los que más
lo necesitan, pero muchos se han quedado
cuidando el sepulcro o se niegan a ver el milagro,
pues un milagro no se explica, se vive.